Me puse unos shorts negros con una blusa blanca y negra a rayas y unas sandalias con un poco de cuña. Me recogí el pelo en una trenza de espiga y me puse unos pendientes blancos.
Me puse levemente la base de maquillaje y eyeliner, algo de colorete y brillo de labios.
Cuando ya estaba cogiendo el bolso, llamaron a la puerta. Fui corriendo a abrir y allí me encontré a Niall, con su radiante sonrisa.
- Hola- dije soriente.
- Wow, estás preciosa- dijo él, provocando que me pusiera roja como un tomate.
- Bueno, ¿se puede saber a dónde vas a llevarme a cenar?- dije intentando desviar el tema para evitar ponerme aún más roja.
- Pues no, es una sorpresa- dijo sacándome la lengua.
Nos montamos en el coche y tras un buen rato conduciendo por un sitio que parecía ser de montaña, paramos.
- ¿Dónde me has traído? Aquí no hay nada, está muy oscuro- dije pegándome a él fingiendo tener miedo... aunque sí que me daba algo de miedo, tengo que reconocerlo.
- Tranquila, no te va a pasar nada- rió y me pasó un brazo por encima de los hombros, pegándome más a él.
De repente se encendieron un montón de luces y pude ver una preciosa casa de madera y un mesa rodeada de montones de lucecitas diminutas y pétalos de alguna flor que no llegaba a reconocer.
Miré a Niall sonriente y él me devolvió la sonrisa, aún más perfecta que la anterior, si eso era posible. Me encantaba aquello, era realmente precioso.
Entramos a la casa. Era aún más bonita por dentro, con la decoración cuidada al más mínimo detalle. Realmente Niall me había dejado totalmente impresionada, no tenía palabras para describir cómo me sentía en ese momento.
Niall entró en la cocina y yo quise entrar con él, pero me echó fuera y me dijo que explorara la casa si quería, pero que bajo ningún concepto entrara a la cocina. Al principio me resistí a aceptar su orden, pero luego pensé que de verdad me apetecía explorar aquella maravillosa casa.
(...)
Pasó un buen rato, yo ya había terminado de explorar la casa y Niall seguía encerrado en la cocina, así que decidí salir fuera y llamar a Chloe para contarle la maravillosa sorpresa de Niall. Tras un largo rato hablando Niall me llamó, así que me despedí de Chloe, que estaba igual o incluso más emocionada que yo misma.
Esta vez Niall me encerró en una de las habitaciones y me llamó al rato, con cara de satisfacción.
- Vamos, ya puedes salir, ya está todo listo.
- ¡Al fin!- grite, haciéndome la indignada por mantenerme encerrada, provocando que Niall se riera.
Salimos de nuevo al patio y vi la mesa con la cena servida. Fuimos hasta la mesa y nos sentamos. Me percaté de que en mi servilleta había una nota, la abrí y leí en voz baja:
"Para mi princesa,
Sé que esto te puede pillar por sorpresa, pero pensé que tal vez cambiar de aires te sentaría bien, así que te voy a contar el plan:
He alquilado esta casa durante el fin de semana para que podamos descansar y relajarnos un poco del bullicioso Londres, así que qué dices, ¿te quedas aquí conmigo?
Niall"
Me levanté rápidamente de la mesa y fui a abrazar a Niall, que me miraba expectante por mi respuesta.
- Sí- susurré antes de besarle, cosa que hizo que Niall se quedara un poco confundido- Niall, quiero intentarlo contigo, creo que eres el chico adecuado y que puede hacerme feliz, así que no voy a tener miedo nunca más- dije sonriendo.
Niall se levantó rápidamente y nos fundimos en un tierno beso. Cuando nos separamos ninguno de los dos podía dejar de sonreir.
- Me acabas de hacer el hombre más feliz de este mundo, Emma- dijo antes de que nos fundiéramos en un cálido abrazo, acompañado de pequeños besos en los labios.
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Buenaaaas!!!!
¿Qué os ha parecido el capítulo?
Bueno, quería deciros que ya voy a recuperar mi ritmo normal de subir capítulos y que a partir de ahora la cosa se va a poner interesante, aunque no prometo que sea inmediatamente e.e
Espero que os haya gustado
Besitooos <3
